Vivimos en unos momentos de incertidumbre, con un escenario económico de noticias en blanco y negro que parece no tener fin.
Y ahora, cuando la seguridad se tambalea, se nos hace cada vez más difícil atrevernos a soñar en grande, agudizar nuestro ingenio, reinventar lo aprendido, innovar y creer más que nunca en la posibilidad de hacer realidad nuestros sueños.
Nos persigue y arrastra la falta de optimismo, hemos perdido las ganas de crear, de crecer, de creer en nuestro talento y de aportar, entre todos, lo que cada uno de nosotros quiere y puede ofrecer.
Sin embargo, vivimos paralelamente un momento de plena innovación, con nuevas vías de comunicación digital que nos permiten unirnos, tener un punto de encuentro entre todos (agentes sociales, empresariales y políticos…) Una gran oportunidad para conseguir que la suma de pequeñas fuerzas se convierta en un vehículo motor para el cambio.
vivimos paralelamente un momento de plena innovación, con nuevas vías de comunicación digital que nos permiten unirnos, tener un punto de encuentro entre todos (agentes sociales, empresariales y políticos…) Clic para tuitear
Sabemos que tenemos que aprovechar este momento de transformación, coger las riendas de nuestro futuro, confiar en el poder de Internet como sector tractor y aprovechar al máximo las posibilidades de la colaboración, pero…
Nos falta creer que podemos.